Las apuestas mutuas o de totalizador explicadas

La mayoría de la gente ha visto las apuestas mutuas, las ha utilizado o las ha ignorado sin saber en realidad de qué tratan. Se usan en carreras, jackpots, torneos, y funcionan de manera diferente a lo que la mayoría de los apostadores están acostumbrados.

 

Es un sistema que no implica cuotas fijas y no funciona como una apuesta deportiva regular. Se basa en una bolsa o fondo común para un evento que se reparte entre las personas que apostaron al resultado ganador. Verás que a esto se le llama indistintamente apuestas grupales, mutuas o de totalizador. El sentido es el mismo.

 

En esta guía, explicaremos cómo funcionan las apuestas mutuas, dónde encontrarlas, cómo detectarlas y si son una opción inteligente para tu estilo de apostar.

 

¿Qué son las apuestas mutuas?

Las apuestas mutuas son un sistema en el que todas las personas que apuestan en un mismo evento contribuyen a una bolsa compartida. Una vez finalizado el evento, esos fondos (menos una comisión para el operador) se reparten entre las personas que respaldaron el resultado ganador.

 

No hay cuotas fijas. Tampoco precios establecidos por la casa de apuestas. Apuestas contra otros apostadores. Si muchas personas respaldan el mismo resultado, el pago se reduce. Si son pocas, los pagos aumentan. Así de simple.

 

Digamos que 10 personas apuestan 10 dólares cada una en una carrera de caballos. Es una bolsa de $100. Dos personas apostaron al ganador. El operador se lleva un 10 %, restan $90. Esos $90 se dividen entre las dos apuestas ganadoras: $45 para cada una. Los demás no reciben nada. Cuantas más personas apuesten por el mismo pronóstico, menor será la porción.

 

¿En qué se usan las apuestas mutuas?

Las apuestas mutuas son más comunes en eventos y deportes en los que muchas personas hacen apuestas al mismo resultado (carreras, torneos o donde el dinero del premio debe ajustarse a la participación). Pero no se usan en todas partes ni es la única opción incluso en eventos donde se encuentran disponibles.

 

Carreras de caballos

En un hipódromo, las apuestas mutuas son la opción predeterminada. Cuando apuestas a través del sistema tote (abreviatura de totalizador), tu dinero se destina a un fondo común y toda la demás gente respalda esa carrera. Las cuotas finales se calculan una vez que se cierran las apuestas y los ganadores se reparten la bolsa.

 

Pero si apuestas en línea a través de una casa de apuestas, esas cuotas normalmente son fijas. Se te ofrece un precio fijo cuando realizas la apuesta, y este no cambia, no hay ningún fondo común involucrado.

 

¿Cómo saber qué tipo de apuestas usas?

 

• En el hipódromo o al usar una aplicación específica para carreras = generalmente apuestas mutuas
• En la mayoría de las casas de apuestas = cuotas fijas

 

Si las cuotas siguen cambiando y tu pago no queda fijo hasta que comienza la carrera, probablemente se trate de apuestas mutuas.

 

Carreras de galgos

Como en las carreras de caballos, hay dos opciones de apuestas en las carreras de galgos. Si estás en el galgódromo o utilizas el sistema de apuestas del lugar donde se realiza la carrera, generalmente son mutuas. El bote de apuestas se abre para cada carrera, la gente se acumula y la bolsa de premios se reparte entre los ganadores después de que la pista toma su parte.

 

Pero de nuevo, muchas casas de apuestas deportivas en línea ofrecen cuotas fijas. Entonces, a menos que indique específicamente que se trata de un mercado totalizador, grupal o mutuo, piensa que son cuotas fijas.

 

Loterías y jackpots grupales

La mayoría de las loterías nacionales y estatales son mutuas por diseño. Cada persona que compra un billete contribuye a una bolsa de premios. Si hay más personas ganadoras, se reparten el dinero entre todas. Ahí no hay un pago fijo, sólo un método fijo para dividir el bote.

 

Verás lo mismo en:

 

• Rifas de caridad
• Jackpots progresivos
• Sorteos de premios conjuntos

 

El operador se queda con una parte y el resto va para los ganadores. Mientras más jugadores, más grandes es el fondo común. Mientras más ganadores hay, menor es la parte recibida.

 

Torneos de deportes de fantasía

Los concursos diarios de fantasía, como los que tiene DraftKings o FanDuel, utilizan una estructura similar. Todos pagan una tarifa de entrada y el dinero combinado se convierte en el prizepool. Las personas con el mejor desempeño se reparten esa bolsa según su clasificación.

 

No hay cuotas ni apuestas de la casa, sino un sistema en el que el tamaño del bote depende de cuántas personas se unan. Y el primer puesto no recibe un pago fijo, sino un porcentaje del bote, como en las apuestas mutuas.

 

Bolsas de pronósticos en deportes electrónicos

Las apuestas mutuas no son lo común en deportes electrónicos, pero aparece en algunos torneos organizados por la comunidad y en plataformas basadas en criptomonedas. Estos sistemas permiten a los usuarios realizar pronósticos en áreas como ganadores de torneos o resultados de partidas. Todas las apuestas se destinan a un fondo común. Una vez que finaliza el evento, las personas que acertaron se reparten las ganancias.

 

No son algo tan frecuente como en las carreras o en la fantasía, pero cuando aparecen, funcionan de la misma manera.

 

¿Como identifico si un evento es de apuestas mutuas o no?

La forma más fácil de saber si te enfrentas a apuestas mutuas es comprobar si las cuotas son fijas o cambiantes. En los sistemas mutuos o totalizadores, el pago potencial cambia hasta que comienza el evento, porque el rendimiento final depende de cuánto dinero se apuesta en cada resultado. Si realizas una apuesta y el pago aproximado sigue cambiando, eso es un fuerte indicador de que se trata de apuestas mutuas.

Fíjate en palabras clave como «tote», «pool» o «mutuel» en la interfaz de apuestas: normalmente indican que no apuestas contra una casa de apuestas, sino que lo haces en una bolsa colectiva junto a otros jugadores.

 

¿Cómo funcionas los pagos de las apuestas mutuas?

Como ya vimos, el dinero de todos en las apuestas mutuas se destina a un fondo común. Una vez finalizado el evento, las personas que apostaron al resultado ganador se reparten esa bolsa. Pero no es tan simple como dividir y vencer, porque no todos apuestan la misma cantidad.

Paso 1. Todos apuestan en el fondo común

No importa a quién o a qué apuestes: cada dólar termina en la misma bolsa. De modo que si cinco personas apuestan al Caballo A, cuatro al Caballo B y una al Caballo C, el bote total se compone de todas esas apuestas combinadas.

 

Por ejemplo:

 

El total apostado fue de $500:

 

• $250 al Caballo A
• $150 al Caballo B
• $100 al Caballo C

 

Paso 2. El operador toma su parte

Antes de que cualquier otra persona reciba su pago, el operador retiene un porcentaje, generalmente entre el 10 y el 20 %. Así es como ganan dinero y cubren costos.

 

Si la bolsa total es de $500 y el operador se lleva el 15 %, retiene $75. Eso deja $425 para los ganadores.

 

Paso 3. El resto de los fondos se reparte entre los ganadores

Digamos que gana el Caballo B. Sólo se apostaron $150 a ese caballo. Los $425 que restan se reparten únicamente entre quienes apostaron al Caballo B, y cada persona recibe el pago según el monto que apostó.

 

Todas las personas que apostaron al Caballo B ganan la misma cantidad por dólar apostado. Cuanto más hayas apostado, mayor será tu pago, pero la tasa es la misma para todos.

 

Para calcular el rendimiento por dólar:

 

$425 ÷ $150 = $2,83 por $1 apostado

 

Así pues:

 

• Una apuesta de $10 te da $28,33
• Una apuesta de $50 te da $141,66

 

Si notas que tu pago es menor a lo esperado, no te asustes. La casa de apuestas no ha jugado una mala pasada. En las carreras del mundo real, los pagos finales con frecuencia se redondean hacia abajo debido a reglas como el breakage (o pérdida por redondeo), de modo que las ganancias reales pueden ser ligeramente inferiores a lo que sugieren las matemáticas.

¿Por qué no conoces tu pago por adelantado?

Hasta que se cierren las apuestas, no sabrás el total final del fondo común ni cuántas personas apostaron por el mismo resultado que tú. Si muchos apostadores se suman a tu selección de último minuto, tu pago disminuye. Si muy poca gente apuesta igual que tú, tu pago aumenta.

 

Por eso las cuotas no son fijas, se ajustan constantemente en función de cómo se distribuye el dinero entre los resultados.

 

Generalmente puedes ver un retorno aproximado antes de que cierren las apuestas, pero ese número cambia con cada nueva apuesta que se realice.

 

Razones por las que algunos apostadores prefieren las apuestas mutuas

No te limitas a las cuotas de una casa de apuestas

En las apuestas con cuotas fijas, los precios ya están establecidos. El margen está integrado. Sólo eliges si aceptas o no la oferta de la casa de apuestas.

 

Las apuestas mutuas no funcionan así. Nadie fija las cuotas, estas cambian según llegue el dinero. Si notas algo antes que el resto del público, serás recompensado por ello. El pago no está limitado a lo que la casa de apuestas esté dispuesta a ofrecer, sino que se basa en la poca popularidad de tu elección.

 

Mientras menos personas tomen tu misma selección, más recibes

Esto es lo que atrae a muchos buscadores de valor. Si tú y diez mil personas más apoyan al mismo favorito, la parte correspondiente será mínima. Pero si respaldas algo que casi a nadie le interesa y triunfa, la bolsa se reparte entre un grupo mucho más pequeño.

 

Una de las grandes ventajas de las apuestas mutuas es que recompensan el acierto cuando nadie más lo consigue, y ¿a quién no le gusta acertar?

Es uno de los pocos sistemas de apuestas sin misterio

No hay ventajas ocultas, ningún sistema de cuotas complicado, ni términos y condiciones ocultos en letra pequeña. Puedes ver cómo se calcula el pago: cuánto hay en el fondo común, qué parte se lleva el operador y cuánto queda para repartir entre los ganadores.

 

Todo está a la vista, incluso si los números finales siguen cambiando hasta el cierre. Es posible que no sepas de cuánto será tu retorno hasta que comience el evento, pero sí sabes exactamente cómo funciona el sistema.

Mayores bolsas = mayores oportunidades

Otra razón por la que la gente se inclina por las apuestas mutuas se debe a que son escalables. Mientras más gente apueste, más fondos disponibles habrá. Y eso abre más posibilidades para detectar un buen valor. Especialmente cuando las multitudes se concentra en los favoritos obvios e ignoran todo lo demás.

 

Ahí es donde los apostadores más astutos suelen mirar. En lugar de seguir a la muchedumbre y apostar a los favoritos, se fijan en quién está infravalorado por el gran público.

 

Hacen de las apuestas un problema de personas, no sólo de estadísticas

En las apuestas con cuotas fijas, tu objetivo es superar las matemáticas de la casa de apuestas. En las apuestas mutuas, es vencer a la manada. No se trata sólo de probabilidades, la psicología también importa.

 

El estado de forma y las estadísticas pasan a segundo plano, y el desafío es descifrar cómo piensa la multitud y luego ir en la dirección que no contemplan. A veces funciona. A veces te estrellas estrepitosamente. Pero cuando lo haces bien, se siente como una recompensa merecida.

 

Inconvenientes de las apuestas mutuas

No sabes lo que ganarás hasta que es muy tarde

En las cuotas fijas, haces tu apuesta y sabes exactamente lo que recibirás si tiene éxito. En las apuestas mutuas, el pago depende de cuántas personas apuesten a lo mismo, y ese número va cambiando hasta que se cierran las apuestas.

 

Así que podrías realizar una apuesta con la esperanza de un retorno decente, sólo para ver cómo las cuotas caen cuando el resto apuesta a lo mismo. El pago disminuye y no puedes hacer nada al respecto. Si eres el tipo del jugador al que les gusta tener certeza, este formato te volverá loco.

Resulta brutal si el bote es pequeño

Las apuestas mutuas sólo funcionan cuando hay suficiente dinero en el bote como para que valga la pena ganar. En un evento de bajo volumen, incluso si apuestas por el ganador, tu ganancia puede ser apenas un poco mayor, especialmente si otras personas apostaron a esa misma selección.

 

No existe un límite mágico que proteja tus pagos. Si el bote es pequeño, el pago es pequeño. No importa cuán inteligente fue tu selección.

 

Los favoritos son castigados

Si te gusta respaldar a los favoritos con precios bajos, las apuestas mutuas pueden ser dolorosas. Cuando la multitud se aglomera en torno a la elección obvia, tu parte del bote se reduce drásticamente.

 

Sí, puede que el caballo gane, pero si todos los demás apostadores también ganan, el pago puede ser penosamente bajo. A veces conviene más abstenerse de apostar.

Los grandes apostadores pueden alterar la bolsa

Como el fondo reunido determina las cuotas, unas cuantas apuestas altas de último minuto pueden cambiar por completo el pago. Si un gran apostador mete $5 000 en tu misma selección, tu retorno bajará drásticamente.

 

No hay límite a cuánto (ni cuándo) puede apostar una persona, por lo que jugadores astutos o sindicatos pueden modificar los números sin mucho esfuerzo.

 

No son recomendables para novatos

Si eres nuevo en las apuestas y simplemente quieres saber en qué te estás metiendo, las apuestas mutuas no te harán la vida precisamente fácil. Los pagos cambiantes, los constantes recálculos, el misterio hasta que comienza el evento, todo puede parecer un poco vago en comparación con la simplicidad de las cuotas fijas.

 

No significa que sean malas, pero sí resulta más difícil administrar tu capital o ceñirte a un plan, especialmente si estás acostumbrado a apuestas en las que $10 significan $90 de retorno, y punto.

 

Es imposible usarlas para apuestas en vivo

Las apuestas mutuas sólo funcionan antes de que inicie un evento. Una vez que se cierran las apuestas, pasa lo mismo con el bote y se establecen los pagos. No hay forma de reaccionar a mitad del enfrentamiento ni de realizar una apuesta de último minuto mientras transcurre la acción. Si te gustan las apuestas en vivo, este formato no te funcionará, las cuotas fijas son la única opción.

 

Cuándo utilizar las apuestas mutuas y cuándo evitarlas

Las apuestas mutuas funcionan:

• Cuando la bolsa es grande porque más gente apuesta, es decir que hay más dinero disponible para ganar.
• Cuando respaldas a un no favorito y no tienes que repartirte el pago con la mitad de los apostadores.
• Cuando eres de los primeros en comprar y consigues un mejor precio antes de que aparezca el dinero atrasado.
• Cuando entiendes el sistema y sabes que tu pago no es definitivo hasta que se cierran las apuestas.
• Cuando apuestas por las ventajas, no por la predecibilidad.
• Cuando disfrutas más de superar en astucia a la mayoría de los jugadores que a una casa de apuestas.

 

Las apuestas mutuas no son adecuadas:

• Cuando los fondos reunidos son muy pocos y no hay prácticamente nada que ganar, incluso si aciertas.
• Cuando respaldas al favorito y tienes que compartir el bote con toda la demás gente.
• Cuando quieres rendimientos fijos y necesitas saber cuánto vas a ganar antes de apostar.
• Cuando odias los cambios de último momento que arruinan tus pagos sin previo aviso.
• Cuando apuestas en eventos de escasa convocatoria que no generan volumen en el bote.
• Cuando juegas por consistencia y necesitas retornos estables para administrar tus fondos.

 

Preguntas frecuentes sobre apuestas mutuas

¿Qué diferencia hay entre las apuestas mutuas y las apuestas de cuotas fijas?

Las cuotas fijas son establecidas por la casa de apuestas y no cambian una vez realizada la apuesta. Las apuestas mutuas utilizan un fondo común y su pago depende del número de personas que apuesten al mismo resultado. Mientras más gente apueste a tu misma selección, menor será la parte que recibas.

 

¿Las apuestas mutuas son mejores que las apuestas de cuotas fijas?

Pueden serlo, si apuestas por el valor, no por la certeza. Las apuestas mutuas recompensan a los ganadores que no gozan de mucha popularidad. Las cuotas fijas generalmente son mejores si apuestas por los favoritos o quieres rendimientos predecibles.

 

¿Por qué las cuotas de las apuestas mutuas siguen cambiando?

Porque se basan en el dinero que recauda el fondo compartido. Cada nueva apuesta altera su equilibrio. Si más personas respaldan tu misma selección, tu parte será más pequeña. Nada es definitivo hasta que se cierran las apuestas.

 

¿Puedo ver cuánto ganaré antes de realizar una apuesta mutua?

Generalmente verás un pago aproximado, pero ese número no es definitivo. El rendimiento real depende de la bolsa final y de cuántas otras personas apostaron por el mismo resultado.

 

¿Dónde están disponibles generalmente las apuestas mutuas?

Las encontrarás en hipódromos, sistemas totalizadores y, a veces, en concursos de fantasía o grupos de deportes electrónicos. La mayoría de las casas de apuestas tradicionales ofrecen cuotas fijas, así que consulta el mercado antes de apostar.

 

¿Las apuestas mutuas pueden ser manipuladas?

No directamente, pero las apuestas grandes realizadas tardíamente pueden sesgar el pago. No es una manipulación exactamente, sólo es la manera en que funciona el sistema. Las apuestas grandes afectan el bote más que las pequeñas.

 

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